Novo mesto

Novo Mesto, que se remonta a tiempos prehistóricos, es una encantadora ciudad de la región eslovena de Dolenjska. Posee un patrimonio arqueológico de fama mundial, lo que le ha valido el sobrenombre de "Ciudad de las Situlas", ya que se han descubierto numerosas situlas en la zona. Novo Mesto ha sido durante siglos un centro de creación artística en numerosos campos (música, literatura, artes visuales). Su exposición de 1920 Primavera de Novo Mesto reunió a artistas de distintos géneros y marcó el inicio del arte de vanguardia en Eslovenia. En cuanto a la arquitectura, Novo Mesto es, como es tradición en muchas ciudades eslovenas, muy colorida y mixta. Un ejemplo es la catedral de Novo Mesto, encaramada en lo alto de la colina Kapitelj. Está dedicada a San Nicolás y es un auténtico edificio gótico reconstruido en estilo barroco en el siglo XVII. Otro hito arquitectónico es el cercano castillo de Otočec. Mencionado por primera vez en el siglo XIII, el castillo de Otočec está situado en una isla del río Krka, que se formó excavando un canal alrededor del castillo para formar un foso defensivo. Hoy, el castillo de Otočec es un hotel de lujo con un restaurante de categoría mundial. Además de su preciosa Plaza Mayor, Novo Mesto ofrece a los visitantes multitud de actividades al aire libre, entre las que destacan el senderismo, el ciclismo y el piragüismo. El paisaje circundante cuenta con numerosas rutas de senderismo señalizadas, la más larga de las cuales es el sendero Trdina, de 150 km, mientras que el río Krka se llena de rafters, kayakistas y pescadores durante los meses más cálidos. Novo Mesto se encuentra entre interminables viñedos y la belleza natural del valle del río Krka, donde los aficionados al vino realizan excursiones por la región de la Baja Carniola. El vino tinto de producción local se llama Cviček. Es una mezcla de varias variedades de vinos locales y es la bebida más popular por estos lares.